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Los matrimonios pueden ser difíciles, cualquier relación a largo plazo requiere cierto esfuerzo, y cuando llegan los niños puede ser aún más arduo encontrar tiempo para mantener la llama del amor brillando. Estudios muestran que disponer de tiempo para ustedes dos es importante en la salud de su relación, y qué mejor manera que tomar unas vacaciones sin hijos. Aquí hay algunos tips para hacer cuando vacacionen en pareja y dejen a los niños con la abuela:

¡Encuentra lo que te hace feliz!

¡Encuentra lo que te hace feliz!

Muchos padres ponen su propia felicidad en stand-by, con el fin de mantener a sus hijos felices, y si bien esto es admirable, también podría ser contraproducente. Tomar incluso un fin de semana o dos para satisfacer sus propias necesidades y metas, ser solo ustedes (en lugar de «mamá» o «papá») puede ser genial incluso para sus hijos. Vacacionar solo con tu cónyuge y hacer cosas que los hagan felices, es algo que también beneficia a sus hijos. Cuando los jóvenes ven a sus padres felices en su matrimonio se establece un buen ejemplo, y la interacción con ellos se torna inherentemente más positiva

Recuerden por qué se han enamorado y diviértanse juntos

Recuerden por qué se han enamorado y diviértanse juntos

Cuando los niños llegan a escena la mayoría de los padres cambian su definición de «diversión» y priorizan el entretenimiento de los niños sobre el propio. Esto es genial, pero deben también ser capaces de divertirse como adultos. Incluso si no pueden tomar unas vacaciones completas solos, consideren dejar a los niños con familiares o en el club de niños del resort por un día. Cuando tomas el tiempo para hacer esto, se pueden redescubrir el uno al otro y tal vez incluso enamorarse de nuevo; es clave tener todas aquellas cosas que amas de tu pareja en mente en el curso de la vida, y las vacaciones te ayudan a hacerlo.

Tengan una noche de buen sueño

Nadie aprecia tanto el valor del buen sueño como un nuevo padre, y rara vez se puede dormir tan bien una noche como cuando vacacionan en pareja. Dormir juntos profundamente es una de las subestimadas alegrías de la vida, y una manera realmente buena de construir intimidad. Además de desterrar el agotamiento emocional y físico de la paternidad temprana, –que es terrible para su vida amorosa–, la siesta juntos los acercará más y pondrá algo de afecto natural en su relación.

Tengan intimidad

Tengan intimidad

La intimidad es muy importante para el matrimonio, y a menudo es una de las primeras cosas que salen corriendo cuando los niños entran en escena; los padres sienten que les falta tiempo para besarse, abrazarse, tocarse y tomarse de las manos, pero es clave que lo hagan. No sólo para ustedes y su relación, sino para sus hijos, que necesitan saber que el afecto es normal y saludable en las relaciones maritales. Las vacaciones juntos les dan tiempo para construir intimidad y hacer de tales gestos un hábito, y esto sólo puede ser bueno para todos en la familia.